La batería, los cargadores o las aplicaciones de alto rendimiento pueden ocasionar el calentamiento del celular. Por lo general, esto puede ocurrir porque hay demasiadas aplicaciones ejecutándose en segundo plano. Para evitarlo, te presentamos consejos que deberías tener en cuenta:
Cerrar las aplicaciones que no estás usando

Es común pensar que, por no estar dentro de una app, está cerrada. Pero, casi todas funcionan en segundo plano y continúan utilizando recursos del celular como batería y ubicación, aunque no estés en ella. Al terminar de usar cualquier aplicación lo recomendable es cerrarla.

Utiliza cargadores y cables certificados

Probablemente en un caso de emergencia, compraste un cargador económico y decidiste guardarlo. Puede que te hayas ahorrado algunos pesos, pero podría resultarte más caro.

Los cargadores no certificados pueden tener un voltaje diferente que pueden dañar la batería de tu teléfono, de paso sobrecalentándola al momento de cargarla.

Evita usar el teléfono si estás directamente bajo la luz del Sol o en un lugar caliente

Este consejo no necesita mucha explicación, ya que al exponer el teléfono directamente a la luz del Sol, ocasionará que se caliente rápidamente y más si lo usas constantemente. En caso de que te haya pasado, deberás moverlo a un lugar templado y quitarle la funda protectora para que se enfríe.

Actualiza el software y las aplicaciones a la última versión

No actualizar las aplicaciones ocasionalmente puede producir que tu teléfono se dañe. Los desarrolladores lanzan actualizaciones para mejorar la eficacia del teléfono y corregir errores dentro de las aplicaciones que ocasionan un uso excesivo del procesador. Al exigirle más, éste comenzará a calentarse.

No uses el teléfono si tiene mala señal

Si tenes poca señal y queres usar internet, el teléfono automáticamente comenzará a cambiar el tipo de red que usa en lo cotidiano. Esto ocasionará que trabaje de más y comience a calentarse.

Nunca ingreses el celular dentro de una heladera

Para enfriarlo podés acercarte a un ventilador o aire acondicionado y exponer el celular a la corriente de aire que se genere. Sin embargo, no importa qué tan caliente esté, nunca lo vayas a meter al congelador. Al hacer eso, el teléfono puede acumular humedad y dañar los componentes internos.

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