Mariana a secas
Para Karen,
sin cuya presencia este poema no existiría.
Me dejé querer un día cualquiera
en una noche de luna llena,
y sentí el amor de tu amistad,
como una ráfaga alocada de quietud.
Me dejé querer una semana de estas,
en un día sin sentido ni final,
y sentí mi nombre sin apellido,
como una fuerza aniquiladora.
Me dejé querer un año impredecible
en un mes lleno de otros cumpleaños,
Y sentí mi ser sin historia,
Como un alma perdida que renace.
Me dejé querer porque sí sin mentiras
en el momento justo y adecuado,
y sentí la esperanza del futuro sin pasado,
como un presente perpetuo.
Mariana Díaz nació y fue criada en la ciudad de San Martín, provincia de Bs. As., Argentina, el 15 de abril de 1973. A temprana edad ya estaba interesada en la lengua castellana; escribiendo sus propios poemas ya a los 13 años. Ganó su primer premio en literatura en 1989.
Interesada en la lengua se recibió de licenciada y docente en lengua y literatura, en la facultad de Filosofía y Letras de la UBA en 2000.
Actualmente, vive en EEUU con su esposo y su hija menor, donde tiene su propia empresa y enseña castellano como segunda lengua a menores de 5 años.
Foto: Amarillo, rojo y azul, de Kandinsky
