El Museo Nacional de Bellas Artes ubicado en Av. del Libertador 1473, el Sábado, 29 de junio de 2019 de 13:00 a 15:00 hs realizará un evento en honor a Pedro Figari Solari pintor, abogado, filosofo, escritor docente y político uruguayo fallecido en 1938.
Nació en Montevideo el 29 de junio de 1861. Estudio derecho y se dedicó a defender a los Pobres en lo Civil y lo Criminal, fue uno de los promotores de la abolición de la pena de muerte.
En 1886 viajó con su esposa a Europa, donde incursionó en el mundo del arte y se contactó con los principales movimientos artísticos. De regreso a su país, si bien su trabajo como abogado, diputado y periodista le llevó la mayor parte de su tiempo estuvo cercano a las artes plásticas.
En 1910 propuso una reforma de la Escuela Nacional de Artes y Oficios con un espíritu innovador, buscando integrar el arte y la artesanía, y en 1915 fue designado director de la misma.
En 1921 se radico en Buenos Aires y luego en París dedicándose plenamente a los 60 años la actividad artista que había desarrollado,antes, privadamente.
Al comenzar a exponer obtuvo buenas críticas del público. En su obra pictórica predomina color, la figura como mancha, frente a la línea fluida y sumamente expresiva.
El leitmotiv de sus obras son patios coloniales o escenas cuyos protagonistas son gente de color, retrató y homenajeo las costumbres uruguayas: El candombe, el tango, la pampa y la vida en las estancias.
Un evento recomendable, para toda la familia. Sin cultura no hay devenir de los pueblos. La cultura forma parte de la idiosincrasia de los pueblos y nos identifica como Nación; y en la gran “aldea Global” de MacLuhan( Semiólogo que plantea que el intercambio cultural de la información y de la cultura a través de la informática genera el acercamiento de los pueblos, no viendonos no como una diversidad de países sino como una “aldea global”)de esta manera el arte se vive mas intensamente porque es mas rápidamente compartido y conocido, llegando todos los lugares del mundo.
Hoy día los medios digitales y las redes sociales posibilitan su acceso, pero no le quita el valor del ” estar ahí” par ver las luces, las sombras, las pinceladas, el aura de la obra pictórica.
Concurrir a museos a vivenciar el arte, es una hecho sumamente enriquecedor.
