Con una programación de Schubert y Mahler a cargo de la talentosa pianista Alexander Golubitskaia y el gran cantante con registro bajo, Gunther Groissbock, abrieron la Ópera estatal de Wisbaden, con estrictas normas sanitarias.
La Ópera de Wisbaden es el primer teatro que se abre al público en este contexto de pandemia que está afectado a nivel mundial, este lugar se fundó en 1894, y alberga elencos como el ballet, la sinfónica, y el coro. El edificio tiene grandes columnas y un frente triangular con motivos barroco, fueron diseñados por arquitectos vieneses.
El programa del concierto consistió con dulces piezas de música clásica del período del romanticismo, entre ellos sonaron obras de Schubert y Mahler, a cargo de la talentosa pianista Alexander Golubitskaia y el gran cantante con registro bajo, Gunther Groissbock, donde deleitaron al público con sus interpretaciones.
Este es el primer teatro en el mundo que abre sus puertas, y lo hicieron con estrictas medidas sanitarias, que fue desde pedidos de documentación, como declaraciones de estados de salud, si presentaban algún sintoma les pedían que por favor no ingresaran al auditorio. El concierto se hizo con un total de 200 personas que es lo que permitían para reducir los riesgos del coronavirus.
Según la página web de la Ópera de Wisbaden informaron que habrá más conciertos en esta semana, entre ellos van a tocar Andreas Schager, Catherine Foster, René Pape, Margarete Joswig, Lidia Baich, Thomas de Vries, Annalisa Stroppa, Aaron Cawley, Sumi Hwan y Michael Volle.
Ojalá que con estrictas medidas sanitarias vuelvan los conciertos de música clásica en nuestro país, la pregunta esta ¿ será posible?
