El nuevo álbum, Beatles a capella experience, contiene canciones de los Beatles cantadas por el cuarteto coral integrado por: Agustina Haynes Soprano, Karin Kohn Contralto, Federico Salles Tenor y Víctor Laterra Barítono. Como su nombre lo indica la grabación es totalmente a “capella”, es decir, sin instrumentos musicales. Tanto la dirección como los arreglos estuvieron a cargo del gran músico y compositor Jorge Carroso.
El material discográfico Beatles a capella experience propone escuchar de una manera novedosa las canciones de los Beatles. Dicho grupo musical revolucionó el rock en la década del 60 por su originalidad y sus melodías.
La novedad de este disco radica en que los temas son totalmente cantados, es decir, que en ningún momento se empleó acompañamiento instrumental (lo que musicalmente se denomina cantar ” a capella”). Esta técnica era empleada en las capillas e iglesias cristianas durante el período gregoriano hasta la Edad Media debido a que estaba prohibido el uso de cualquier otro instrumento dentro de ellas distinto de la voz. (En italiano “a capella” justamente significa “en capilla”).
Los arreglos y la dirección musical de este formidable trabajo estuvo a cargo de Jorge Rosso. Dicho músico afirmó, irónicamente, que se había dado “el gusto de desarreglar a los cuatro de Liverpool”. Con respecto a la producción, el maestro incluyó voces masculinas y femeninas; sobre esto, explicó que “las voces se van presentando al comienzo de manera más bien simple y luego se van yuxtaponiendo y superponiendo, unos a otros, generando intrincadas texturas que invitan a climas y emociones, que espero lleguen a destino del oyente cerrando el circuito pretendido”.
En cuanto al contenido discográfico, Rosso afirmó, en un diálogo con Diario Cultura, que “cada uno de los temas plantea distintos acertijos musicales. Por ejemplo, en “Things we said today” y “I´ll be back”, a lo largo del arreglo, las distintas secciones de ambos temas se van alternando en un orden que no se corresponde con los originales. Pero es interesante que eso resulta tan natural que además de no atentar contra el original, aporta otros puntos de vista válidos”.
El arreglista, por criterio propio, eludió en este disco las canciones más conocidas de los Beatles y trató de evitar las onomatopeyas -tales como Tum – tum, Bom – bom- que suelen ser usadas muy frecuentemente en los coros.
Los temas fueron trabajados con tal dedicación y habilidad tienen un alto valor artístico aún para los receptores que no conozcan las canciones originales.