Rompe, rompe
Rompe, rompe
ese espejo
que no refleja
quien eres.
Rompe, rompe
esa imagen
que no eres
por una que sí.
Rompe, rompe
los esquemas
aprendidos mal
que ya no sirven.
Rompe, rompe
las estructuras
que no sirven
porque me queman.
Rompe, rompe
la fantasía
que no es mía,
nunca lo fue.
Rompe, rompe
lo que sea
que ya no importa
qué piensen.
Rompe, rompe
sé tú misma
que no necesito
que me destruyan.
Rompe, rompe
y sigue rompiendo
todo lo que
me ate a tí.
Interesada en la lengua se recibió de licenciada y docente en lengua y literatura, en la facultad de Filosofía y Letras de la UBA en 2000.
Actualmente, vive en EEUU con su esposo y su hija menor, donde tiene su propia empresa y enseña castellano como segunda lengua a menores de 5 años.
La imagen que acompaña a este poema pertenece a Leonardo Pablo Diez.